Nuestra Historia

BREVE HISTORIA DEL SEMINARIO “DIVINA PASTORA” DE BARQUISIMETO EN SUS 7 ETAPAS:

Seminario de San Agustín (1869 – 1872)

Cuando Barquisimeto empezó a ser diócesis, separada de la de Caracas, en la Bula de erección del 7 de marzo de 1863 se imponía al Obispo como obligación primordial la fundación de un Seminario propio:

“…Y porque es de desearse que en tan extensa viña de Nuestro Señor Jesucristo se aumenten los buenos operarios que puedan cultivarla con esmero y centuplicar los frutos espirituales, por tanto recomendamos al celo de los Prelados de Barquisimeto… que se provea a la mayor brevedad un edificio conveniente para el Seminario que ha de erigirse y administrarse diligentemente a ejemplo de las demás diócesis, según lo prescrito por el Santo Concilio de Trento, cuidando ante todo de asignarle y destinarle para su perpetua estabilidad y mayor incremento una dotación suficiente a fin de que se eduquen en él, en la piedad y en la ciencia, cuanto es más escaso el número de buenos presbíteros en las extensísimas regiones de Venezuela”. (Bula “Ad Universam Agri Domini Curam”, de Pío IX, de 7 de marzo del 1863).

El Primer Obispo de Barquisimeto, consagrado en noviembre de 1868, el Excmo. Sr. Dr. Víctor José Díez, llegaba a su sede episcopal de Barquisimeto en mayo de 1869, y en sus prioridades pastorales puso la del Seminario. Ya en el primer año de su pontificado abrió el Seminario de San Agustín el 3 de octubre de 1869.

Empezaba con 21 alumnos, y tuvo como primer Rector al Pbro. Dr. Antonio María Durán, más tarde Obispo de Guayana.

El Seminario se ubicó en la casa de la Familia Barrios Canelón, ahora Silveira, en la calle 23 con carreras 16 y 17, al lado de la catedral de San Francisco.

Este primer Seminario fue clausurado por la ley de Guzmán Blanco en 1872. En una nota del 11 de octubre de 1872, el Obispo Mons. Víctor José Díez manifiesta al Presidente del Estado:

“Hoy mismo quedará cumplido dicho decreto en lo que toca al Seminario de San Agustín”. Sobre el inventario de los archivos, bienes y rentas, “paso por la pena de informar a usted que el de esta ciudad no tiene ni administrador, porque no ha tenido ni bienes ni rentas que manejar, ni el establecimiento ha contado hasta hoy sino con las limosnas que yo he solicitado para el sostenimiento de los catedráticos y empleados y con las módicas propinas de los alumnos, que se empleaban en su propia subsistencia”.

Durante varios años (hasta 1877) la diócesis quedó sin Seminario.

Colegio Seminario de San Agustín

(1877 – 1891)

En 1877 el Pbro. Juan Pablo Wohnsiedler, animado también por el mismo Obispo Mons. Víctor José Díez, para suplir al Seminario, abrió la Escuela de San Agustín, que debía servir también para alumnos destinados al sacerdocio.

El año siguiente 1878, el 14 de enero, es elevada a Colegio para leer cursos de filosofía. En memoria del extinguido Seminario se llamó Colegio de San Agustín, y debía servir para estudios eclesiásticos y civiles.

De él salieron muchos hombres célebres que ha tenido el Estado Lara en esos años, y varios beneméritos sacerdotes.

Tuvo su sede en una vieja casa al lado de la iglesia de la Paz, en la calle 29 con carrera 16.
Este prestigioso Colegio Seminario fue clausurado en 1891 por los graves quebrantos de salud del P. Wohnsiedler.

Colegio Episcopal de San Agustín

(1891 – 1900)

El mismo año en que se clausuraba el Colegio de San Agustín, el Obispo Mons. Víctor José Díez daba un Decreto el 20 de agosto de 1891 creando el Colegio Episcopal de San Agustín:

“…Considerando que es de absoluta necesidad, pensar en la educación que han de recibir los jóvenes dedicados a la carrera eclesiástica, y atendido que en esta diócesis, no hay actualmente un Instituto escolar que llene las condiciones para el caso, decretamos:

Se Crea en esta ciudad un Instituto de educación con el nombre de “Colegio Episcopal de San Agustín”, que empezará a funcionar desde el 15 del próximo septiembre.
Todos los ordenados de esta diócesis y aun los que vinieren de otras a recibir Órdenes, están obligados a vivir como internos en este Instituto, bajo las prescripciones del reglamento que se dictará.

Se fundan cuatro becas gratis para jóvenes que además de ser pobres, tengan cualidades intelectuales y buena conducta… Todos los demás jóvenes serán pensionistas a razón de 60 bolívares mensuales por comida y educación

En este Instituto se enseñarán las materias siguientes: Gramática Castellana, Latinidad, Francés, Escritura Sagrada, Teología Moral, Urbanidad práctica, Liturgia Sagrada, y Canto llano y lo relativo al trienio filosófico...

Nombramos Director de este Instituto al Pbro. Dr. Pedro María Alvarado, quien a su vez nombrará un Subdirector que le ayude en la más estricta vigilancia. El sueldo mensual del Director será de 160 bolívares.

Se destina para local de este Instituto la casa de Nuestra Señora de San Juan, en que estaba el Colegio de San Agustín, recientemente extinguido.

Dado en nuestro Palacio Episcopal de Barquisimeto a 20 de agosto de 1891. Víctor José, Obispo”

Este Colegio Episcopal fue un verdadero Seminario, aunque no tenía el nombre, existiendo todavía la ley que prohibía los Seminarios.

Empezó a funcionar el 15 de septiembre de 1891 en el local llamado Casa de Nuestra Señora de San Juan, en la misma que estaba el Colegio de San Agustín, recientemente extinguido, al lado de la iglesia de la Paz, en la calle 29 con carrera 16.

El primer rector fue el Pbro. Dr. Pedro María Alvarado.

Una carta al Vicario General y Provisor de la diócesis, Dr. Juan Pablo Wohnsiedler, al Rector, en ese mismo año de 1891, determinaba que ningún joven podría recibir órdenes sagradas, si no había permanecido a lo menos dos años en régimen interno y cumplido con todos sus exámenes.

En este Colegio se formó también un buen grupo de sacerdotes diocesanos.
El 13 de octubre de 1893 murió el primer Obispo de Barquisimeto, Mons. José Díez.
Desde el 13 de enero de 1895 rigió la diócesis el segundo Obispo de Barquisimeto, Mons. Dr. Gregorio Rodríguez y Obregón, hasta el 6 de noviembre de 1900.
Este Colegio Episcopal de San Agustín duró con alternas vicisitudes hasta 1900.

Seminario de Santo Tomas de Aquino (1901 – 1929)

Un decreto del General Castro en 1900 permitió restablecer los Seminarios en Venezuela, y Mons. Aguedo Felipe Alvarado, que entonces era Vicario Capitular, el 21 de enero de 1901, fundaba un nuevo Seminario con el nombre de Santo Tomas de Aquino.
Tuvo su sede en la casa de la familia Agüero, situada en la calle 22, al lado de la Catedral de San Francisco.
Se cerró en 1903 al salir un brote de fiebre amarilla. Entre las víctimas hubo también un joven ordenado.

Se abrió de nuevo en 1904, pero en la casa del Pbro. Canónigo Nicolás Vásquez, situada en la calle 24, entre carreras 16 y 17, hoy casa de la familia Gil.
En 1909 se ubicó por orden de Mons. Aguedo Felipe Alvarado en la casa que era Palacio Episcopal, donde nunca vivió Mons. Aguedo Felipe Alvarado, puesto que él continuó viviendo también como Obispo en una casa de la calle 25, detrás de la Parroquia de la Concepción, hoy desaparecida.

El Seminario tuvo interrupción durante los años de la guerra, pero una vez restablecida la paz, siguió funcionando de nuevo con toda regularidad.
Dio a la Iglesia de Barquisimeto muchos recordados sacerdotes. Confería grados de bachillerato. En el año de su comienzo tenía catorce alumnos, y cuatro de éstos llegaron al sacerdocio.
Duró en sus distintas sedes hasta la construcción de un nuevo Seminario, que fue empezado por Mons. Aguedo Felipe Alvarado en 1923 y terminado por su Sucesor el Obispo Mons. Enrique María Dubuc en 1929, (el actual Instituto Diocesano).

Seminario “Divina Pastora” (1929 – 1954)

El 13 de febrero de 1923 fue puesta la primera piedra para la construcción de un edificio propio para el Seminario. Este edificio, que es el actual Instituto Diocesano, se construyó al lado de la antigua catedral de San Francisco.

Fue inaugurado solemnemente el 1 de enero de 1929, aunque no estaba terminado completamente, con el nombre de Seminario “Divina Pastora”. Y en dicho acto pronunció un memorable discurso el Pbro. Dr. José Humberto Quintero, que después fue Arzobispo de Caracas y Cardenal de la Iglesia.
La inauguración definitiva fue en 1936 con la presencia del Nuncio Apostólico Mons. Felipe Cortesi.

Mons. Enrique María Dubuc llamó a los Padres Paúles para regentar el nuevo Seminario. Por primera vez llegaban al país en 1931.
En esta sede se encontró el Seminario Mons. Críspulo Benítez Fontúrvel cuando tomó posesión de la diócesis el 20 de noviembre de 1949, como su quinto Obispo.

Seminario “Divina Pastora”

en la Concordia (1954 – 1976)

En 1950 el Obispo Mons. Críspulo Benítez Fontúrvel empezó la construcción de un nuevo Seminario en la Urbanización “La Concordia”, Avda. Libertador, (ahora Ciclo Básico Coto Paúl).

Fue inaugurado el 20 de noviembre de 1954. Los Padres Paúles continuaron en la dirección del mismo hasta el año 1967 en que pasó de nuevo a los Sacerdotes Diocesanos.
El 30 de abril de 1966 la diócesis de Barquisimeto fue elevada a Arquidiócesis, y Mons. Críspulo Benítez Fontúrvel fue su primer Arzobispo.
El tuvo la satisfacción de ordenar sacerdotes a alumnos que habían realizado en este Seminario la carrera sacerdotal completa.

Seminario “Divina Pastora” en El Manzano (1976 - ……)

En 1975, al terminar los ejercicios espirituales del Clero Diocesano, Mons. Críspulo Benítez Fontúrvel decidió construir un nuevo Seminario fuera de la ciudad, en el Cerro Manzano, Vía Río Claro, y encomendarlo a los sacerdotes españoles pertenecientes a la “Fraternidad Sacerdotal de San Juan de Ávila”.

Fue inaugurado el 1 de octubre de 1976, con la asistencia del Nuncio Apostólico Mons. Mariani.

Para esta ocasión el Santo Padre el Papa Pablo VI envió el siguiente telegrama por medio de su Secretario de Estado el Cardenal Villot:
“Al inaugurarse la nueva sede del Seminario de Barquisimeto el Santo Padre expresa cordial felicitación a Vuestra Excelencia, Señor Obispo Auxiliar, Sacerdotes, Seminaristas y fieles de la comunidad diocesana y mientras formula fervientes votos para que importante obra constituya estima constante y trabaje a favor de las vocaciones sacerdotales, otórgales de corazón implorada Bendición Apostólica”. Septiembre – 1976.

El 14 de enero de 1982 se inauguró la parte del Seminario Menor, que está junto al edificio del Seminario Mayor, con la asistencia del Presidente de la República, Dr. Herrera Campins, y del Sr. Nuncio Apostólico, Mons. Luciano Storero.

El Sr. Arzobispo, ya al final de su servicio pastoral, podía mirar con complacencia esta obra que entregó a la Arquidiócesis, una de las perlas más bellas y más preciosas de su largo pontificado. El 18 de octubre de 1982 el Papa Juan Pablo II aceptó la dimisión presentada por motivos de edad del primer Arzobispo de Barquisimeto, Mons. Críspulo Benítez Fontúrvel, y nombró a su sucesor, Mons. Tulio Manuel Chirivella Varela, (hasta entonces Obispo de Margarita).

El 14 de diciembre de 1982 tomó posesión de la Arquidiócesis, como segundo Arzobispo de Barquisimeto, Mons. Tulio Manuel Chirivella Varela, quien en una de sus primeras declaraciones dijo: “…Una de mis mayores preocupaciones es la que se refiere a las vocaciones… El Seminario será de mis principales preocupaciones”